Nací en Cáceres en 1995, era muy joven cuando comencé a interesarme por la fotografía, fue un curso de fotografía digital básica que realicé durante la etapa de bachillerato, lo que me impulsó a profundizar en sus aspectos técnicos.
Pronto me di cuenta de que lo que más me entusiasmaba era fotografiar personas, tratando de contar su historia a través de una fotografía. Esta fue la razón que me llevó a especializarme en reportajes sociales.
En 2017 me convertí en fotógrafo de bodas, un trabajo que no solo me permite expresar mi creatividad, sino que también me ofrece oportunidades continuas para conocer gente nueva y conocer lugares fantásticos.
¿Mis pasiones? Desde niño siempre he tenido debilidad por la naturaleza, amo las montañas y el mar, hasta el punto de que no concibo mi vida sin poder viajar y conocer lugares nuevos. ¡Siempre estoy feliz si me encuentro en un entorno mágico y lleno de naturaleza y nunca pierdo la oportunidad de dedicarle unos minutos de mimos para sacar las mejores instantáneas!
Luego el deporte, sin importar el tipo, ya sea running o trekking, aunque mi deporte preferido es el ciclismo en todos sus ámbitos.
El estudio de lenguas extranjeras (inglés) es de hecho otro de mis intereses y ocupa gran parte de mi tiempo.
Me encanta la buena comida y siempre estoy abierto a nuevas experiencias de nuevos gustos y sabores, porque eso también te acerca a las culturas.
Viajar es lo que más me estimula, lo considero muy importante, una verdadera inversión para la memoria. Cada país que he visto, cada persona que he conocido me ha dejado una huella y todo eso ha servido para enriquecer mi experiencia y mi sensibilidad.
Con estas premisas es fácil imaginar cómo prefiero la naturalidad en mis servicios. No se ven ni se observan poses obvias, fotografías grupales estáticas o tomas. La clave de mi trabajo es la espontaneidad y mi objetivo es tratar de captar mejor la esencia de ese día a través de mis fotografías.
Sencillamente, casi como si fuera invisible, pero en realidad alerta y presente, sigo a los novios a lo largo de la celebración, atento a que ninguna emoción se escape de sus rostros, dispuesto a captar el nacimiento de una sonrisa, un gesto de ternura o un momento inesperado.
Aunque estoy ubicado en Cáceres, mi curiosidad y deseo de descubrir siempre nuevos lugares me hacen estar disponible para cualquier trabajo en Extremadura o en España, así que no dudes en contactarme para obtener información. Sea cual sea el lugar que hayas elegido para celebrar tu boda, siempre estaré encantado de estar allí contigo para contarte la historia.
Borja Barrantes © 2024